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Tuesday, March 22, 2011

El primer y eterno amor


El primer y eterno amor



Comenzó un día en el autobús de la escuela. Una chica se sentó junto a un individuo muy extraño. Ella, se llamaba Marijo y era nueva, decidió hacer plática con ese chico. Le preguntó su nombre y él le contestó. Eso fue todo. Los días siguientes lo veía caminando por la escuela, en su grupito de amigos, bromeando sarcásticamente. Deseé en ese momento conocerlo más, pero no sabía cómo.

Un chico que se llamaba Ricardo, se dirigía a la escuela en autobús y ese día se subió una chica diferente que le llamó mucho la atención, y se sentó junto a él. Ella le empezó a platicar pero como él era muy serio y nervioso con la chica, se mostró frío. En los días siguientes él seguía observando con mucho interés. En semanas, por un amigo mutuo empezaron a acercarse y se hicieron amigos, pero en ellos había algo especial, tal vez nervios, al gustarse uno al otro.

Pasaron algunos meses y su relación fue aumentando, y Majo comenzó a quererlo, pero no sabía exactamente que era lo que él sentía por ella. Él, por otra parte comenzaba a querer estar más tiempo con ella porque estaba sintiendo cariño hacia ella. Un día, finalmente, estando entre amigos, empezaron a darles carilla. Él no lo soportó y declaró su amor a esa chica que él quería tanto.
La chica, feliz, Inmediatamente dijo sí, y se tomaron de las manos, además de darse un beso nervioso.
No se vieron en tres días, y en ese largo fin de semana, Ricardo sentía que debía estar con Majo como diera lugar, y ella quería verlo con tantas ganas como jamás había sentido. Cuando se vieron, ambos sintieron maripositas que revoloteaban en sus estómagos y se sintieron felices. Pasaron pocos días, y para esto, Ricardo sintió que estaba enamorado, tanto, que le pareció que ya había amado a esa chica antes, por mucho tiempo. Ella pensaba lo mismo, pero tenía vergüenza acerca de qué pensaría él.
Al final, Ricardo le dijo a su novia que la amaba. Ella lo miró a los ojos, sintió que un tipo de felicidad y euforia la dominaba y vio que era sincero. Ella dijo “Yo también te amo”. Su amor había crecido tanto hasta el punto de amarse para siempre, los deseos de formar una familia, ser felices, y sobre todo, estar juntos. Muchos dijeron cosas, pero a ellos jamás les importó. Saben que su amor es para siempre y es como ellos quieren, no como otras personas dicen. Se aman tanto…. que están dispuestos a todo.

(Anónimo)

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