Hoy sigo enamorado

Hola a todos. Quiero contarles una parte de mi historia, una de historia de amor que creo no haber elegido. Un amor que empezó adolescente, un amor que me dio mi primer fracaso, que me dio mi primera ilusión, pero que trajo a mi vida tanta luz como oscuridad.

Todo comienza hace 4 años, más o menos. Yo tenía 15 años, era chico, sin experiencia, para esa época aun tenia inocencia, era callado, tímido y poco atractivo físicamente. Estaba en cuarto año de la secundaria. Recién empezaba el año, parecía ser un año más de lo que tantos se sumaban a una adolescencia aburrida, sin sobresaltos, correcta y marcada. Ese año fue en el que me enamore de ella, alta, rellenita, cabellos ondulados con negro, ojos verdes… un carácter arrollador para su edad, una chica popular, una adolescencia como toda la de una chica que sabe lo que quiere cuando lo quiere.
Fue ese año el que deje de saber de ella para empezar a averiguar. Éramos compañeros, lejanos, por nuestra vida por nuestros deseos, por nuestras creencias.

Fue un día recuerdo yo estaba sentad en la ultima fila de mi curso cuando discutía con ella por algún asunto, y fue cuando un compañero pareció encender algo que hasta hoy brilla en diferentes tonalidades. Me dijo “che vos harías buena pareja con ella. Están los dos locos”, y fue en ese preciso momento cuando desperté, o enceguecí, como quieran llamar al amor. lo supe, deje de mirarla para observarla, deje de oírla para escucharla, deje de querer para amarla, deje de hablar para callar eso que no entendía, eso que me llenaba adentro muy profundo pero a la ves me hacia saber de un vacío en mi.

Pasaron los días, las horas de clases, las semanas los meses, le escribí canciones, poemas, la dibuje, fantaseé mil formas de sorprenderla, pensé mil formas de decirle que la amaba, pensé formas de que lo descubriera sola en mis ojos, sentía que lo sentía, la pensaba día y noche, me reía al verla, siempre el primero en sonreír, la llore… simplemente la amaba con el alma realmente, dispuesto a todo. No era mi edad, lo supe tiempo después, era amor.

Paso un año de esa adolescencia inocente, conocí otras chicas. Pero nada, el amor platónico, el amor que admira estaba ahí presente, fuerte, erguido. Nada lo destruía, ni el tiempo ni la distancia, ni siquiera sus novios, nada.

Un verano, no lo dudé, la había visto a la tarde y me dije, esto no puede ser así. No puedo no decirle todo lo que siento y le escribí un mail contándole todo. A los minutos, me mando un sms diciéndome “me gustaría sentir lo mismo que vos, gracias”.

Al tiempo me entere que mi mail había pasado por la mano de todos mis compañeros de curso, por consiguiente, era el hazmerreír. Meses, muchos meses, casi un año en el mismo curso sin hablarnos.

Pero como el tiempo pasa, y sus vueltas son increíbles, ella volvió un año después, me pidió perdón, y quedamos como amigos. Esa amistad fue creciendo, hasta que me transforme en su mejor amigo. Terminamos el secundario y ambos elegimos la misma carrera para estudiar. Fue ese mismo año, en el que ella se puso de novia. Un chico muy bueno, sencillo, sin vueltas, no sentía ningún rencor por el ni nada, todo muy bien.

Pasaron los días, y ella años atrás me había hablado de una prima de ella, siempre la nombraba, me decía que era especial, diferente al resto, alguien distinto, pero era un comentario mas. Ese año conocí a su prima. Ante la duda quería descubrir quien era, tantos años hablando de ella, confieso que cuando la vi no sentí nada muy especial, pero al pasar los días, su prima me hizo descubrir dos cosas: la primera que ya no estaba enamorado de ella y la segunda que me había vuelto a enamorar, por segunda ves. El amor después del amor. Pero no todo seria tan bueno. Esta chica era lesbiana, si, lesbiana y el sábado me confeso que esta enamorada de su prima, la misma chica de la que estuve enamorado yo antes. Hoy sigo enamorado.

(Anónimo)